sábado, 11 de julio de 2009

Principios y Valores Fundamentales


Atendiendo a la gentil invitación formulada por el grupo "Mujeres por la Libertad" para debatir el acontecer internacional en general y los casos de Honduras e Iran en particular, me correspondió cerrar el foro, en la palabra me precedieron, Gerardo Fernández, Iván Carratú Molina, Julio César Pineda, siendo el moderador el destacado Carlos Vecchio.

El foro demostró la inmensa necesidad de conocer como lo que ocurre fuera de nuestras fronteras en tiempos de globalización e información afecta la percepción que tenemos de nuestro país y de nosotros mismos. Hubo expresiones con las cuales estoy en total desacuerdo, afirmaciones que no comparto y discursos incompatibles con mi modo de pensar.

Los valores y principios no son negociables, la Democracia, la Libertad de Expresión y el respeto de los Derechos Humanos son ese legado que no puede ser transado por el momento, porque sea conveniente. Suspender los valores y negar los principios o flexibilizarlos para justificar acciones de fuerza, es peligroso, y además nos coloca en la misma acera de aquello que adversamos, es la negación de lo que defendemos.

Lo ocurrido en Honduras es una lección sin duda, para la OEA cuya actuación ha quedado seriamente cuestionada como mediadora política en la solución pacifica de las controversias, para los políticos de todo el continente que coquetean abiertamente con la reelección para mantenerse en el poder usando la democracia y las leyes para legitimar su accionar; para las instituciones y los poderes constituídos quienes ejerciendo sus funciones de contrapesos al poder ejecutivo pueden hacer perfectible la Democracia cuando esta elija otros derroteros. Y también que los militares no son el arbitro de los destinos de un país, deben estar subordinados al poder civil sin discusión, sin medias tintas y sin excusas.

Una reflexión final no solo basta con hablar de los principios y valores de la Democracia, debemos actuar también conforme a ellos.